Se realiza por medio de una Lipoescultura facial donde se elimina la grasa localizada en la zona mandibular, comúnmente llamada papada, redefiniendo el contorno facial.
Esta intervención es una de las más gratificantes dentro de la cirugía tanto por sus resultados estéticos como por la facilidad con la que se lleva a cabo, con un riesgo mínimo y además un precio más bajo que otro tipo de liposucciones.